Por Miguel Caso
Marraná de pulpo
Tenemos que empezar eligiendo un pulpo de dimensiones importantes y aprox. un kilo de bicho por pareja de comensales porque al guisarlo merma a la mitad, lo congelamos y así evitamos tener que darle una paliza para enternecerlo. Descongelamos la noche antes y por la mañana bien temprano nos ponemos el mandil y manos a la obra. Limpiamos el pulpo y troceamos las patas en trozos grandes, lo ponemos en una cazuela alta con una cebolla entera, dos tomates, dos hojas de laurel, unos granos de pimienta negra y una cabeza de ajos, todo en crudo cubrimos con agua y dejamos cocer una hora y media mas o menos. Al final añadimos las patatas con un vaso de vino tinto, medio de coñac, una pizca de clavo molido y pimentón, dejamos que reduzca hasta no quedar casi nada de caldo y a servir acompañado de buen y abundante vino.El sabor es espectacular y si el pulpo está rico, las patatas quedan de vicio
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